Hace algunas semanas, una amiga, emprendedora, madre y profesional a la que admiro mucho, publicó un post en sus redes que me hizo reflexionar sobre el ÉXITO, y qué es esto en realidad, y empecé a hacerme un montón de preguntas al respecto. ¿Hay una definición global de lo que significa tener éxito o ser exitoso o exitosa, con la que todos no podamos alinear? ¿Es lo mismo para todos? ¿Cómo sabes si lo has logrado o no? ¿Éxito o éxitos? … Así que me puse manos a la obra a investigar sobre ello. El éxito es un concepto buscado por todos desde el principio de los tiempos y, por supuesto, algo que difícilmente se alcanza de la noche a la mañana. Pero veamos que dicen primero las referencias y distintas fuentes de información.
El concepto
Empezaré por algunas definiciones y su origen. Según la RAE, hay tres definiciones de éxito: “Resultado feliz de un negocio, actuación, etc.” “Buena aceptación que tiene alguien o algo.” “Fin o terminación de un negocio o asunto.”
La palabra “éxito” tiene su origen en el latín exire “salir”, formada por ex “fuera” e ire “ir”; fue registrada en castellano en 1732, en el Diccionario de Autoridades, con su significado original, pero luego evolucionó hasta su sentido actual de “salida feliz” o “resultado feliz” de algún negocio. En inglés, “exit” conservó su sentido original latino, según se indica en la web especializada en el idioma español elcastellano.org
La revista digital Forbes, en su artículo titulado “Las definiciones de éxito que jamás deberías olvidar” dice que “El éxito tiene tantas variantes como personas en el mundo. La definición de esta palabra es algo abstracta porque para cada uno, significa algo distinto. Para una persona puede significar lograr el puesto más alto de su empresa, mientras que para otra el éxito es mantenerse tranquila y feliz tal y como está.” Y a continuación, muestra algunas de las frases célebres y definiciones de éxito más populares de la historia “que nadie debería olvidar”. Cito algunas de las que me han parecido más interesantes:
1. “El éxito es aprender a ir de fracaso en fracaso sin desesperarse”. Winston Churchill. La clave está en aprender de ellos, en no tirar la toalla y no caer en la desesperación. El éxito es seguir adelante.
2. “Para tener éxito, la planificación sola no es insuficiente. Uno debe improvisar también”. Isaac Asimov. Tener las cosas excesivamente planificadas nos hará tropezar. El mundo, las circunstancias que nos rodean, son cambiantes. Debemos saber adaptarnos rápidamente, improvisar.
3. “La llave del éxito es el conocimiento del valor de las cosas”. John Boyle O’Reilly. Es imposible ser exitoso sin darle el valor que merece a todo aquello que vamos consiguiendo.
Cuando empecé a indagar sobre los sinónimos de éxito encontré lo siguiente: victoria, triunfo, gloria, fama, consecución, culminación, celebridad, renombre, notoriedad (fuente: wordreference.com)
Estas definiciones me llevaron a la siguiente pregunta: ¿Qué diferencia un logro, de una meta y del éxito? ¿Lograr ser, por ejemplo, una celebridad sería un éxito para mí? Y estas preguntas, a su vez, me invita a reflexionar sobre lo rápido que hablamos hoy en día sobre estos tres conceptos, y concretamente del uso tan mecánico que le damos a esta palabra y que damos por sentado: todo lo que se haga y salga bien, es un éxito.
Pero, ¿qué pasa con todos esos tropiezos, fracasos e intentos fallidos que quedaron en el camino?
Miedo al Éxito
Continué consultando y encontré un artículo publicado por la web La mente es maravillosa que hablaba sobre el concepto que nos ocupa, y hubo algo que me llamó muchísimo la atención dentro de la redacción. En el artículo llamado “Finalmente, ¿qué es el éxito?”, escrito por la periodista Edith Sánchez, se mencionaba el “miedo al éxito”, y al leerlo llegué incluso a sentirme identificada con algunas cosas, al darme cuenta de que había sentido esa parálisis en algunas ocasiones. Resumidamente, lo que indica es que, si bien la mayoría de las personas aspira al éxito, existen algunos individuos que llegan a experimentar un temor asociado a las consecuencias de lograr el éxito. Pongo un ejemplo, una persona desea emprender y tiene una buena idea, pero se boicotea a sí misma convenciéndose de que no va a ser capaz, o retrasando el momento, o incluso renunciando al proyecto cuando todo va viento en popa y a punto de alcanzar ese éxito perseguido, de forma consciente o inconsciente, como un globo que se desinfla.
El artículo también hace referencia a posibles factores que pueden influir en ese miedo como, por ejemplo, la creencia, inconsciente o no, de no ser merecedores del éxito, lo que hoy en día llamamos el “síndrome del impostor”, que es cuando las personas sienten que no son lo suficientemente buenas a pesar de sus logros, los cuales no saben reconocer, o se perciben a sí mismas como un “fraude”. Por otra parte, están las experiencias negativas vividas en el pasado debido al éxito, y en este punto se me ocurre un ejemplo que he visto repetirse varias veces en entornos laborales, y es cuando una persona realiza bien su trabajo y es felicitada por sus superiores, y sus pares realizan comentarios jocosos haciendo alusión a que fue un golpe de suerte, o a que esa persona se ve beneficiada por un supuesto favoritismo, y también al revés, cuando es alabada por sus pares y, sus superiores, en lugar de reconocer el logro, no dicen nada o incluso dan a entender que se podría haber hecho mejor, minimizando, dejando invisible o incluso apropiándose el mérito del buen trabajo realizado. Todos estos puntos mencionados, generan inseguridad en las personas. Y, para terminar, el texto alude también la timidez o ansiedad social como causa del miedo al éxito, esto sucede en personas que temen que, al culminar un proyecto con éxito se volverán el centro de atención de otros.
Me ha parecido muy interesante incluir esta variable en torno al éxito ya que me hace pensar y reflexionar sobre mis propios miedos y cómo podemos ver el vaso medio lleno o medio vacío según nuestros rasgos de personalidad, actitud o decisiones que tomamos.
Mi definición
Y tras esta breve y general revisión a distintas opiniones, autores, y otras fuentes de información, voy a compartir lo que significa el éxito para mí.
En mi opinión, y siempre desde mi experiencia y vivencias, mirando a mi “yo” de hace 10 años atrás, me doy cuenta de que las expectativas de lo que conformaría mi definición de éxito, van cambiando en las distintas etapas de la vida. Por ejemplo, hace 20 años, lo que suponía un éxito para mí era terminar mis estudios superiores y conseguir un empleo en el que ganara el dinero suficiente para independizarme económicamente. Y lo conseguí. Hace 10 años, esa definición de éxito evolucionó y se convirtió en lograr una posición de liderazgo donde, además, mi salario fuera el suficiente como para no tener que preocuparme de “llegar a fin de mes”, y empezar a ahorrar, asimismo, en esta versión de éxito, se sumaba formar una familia, y también lo conseguí. Contado así parece una historia sacada de un cuento de hadas, donde todos los sueños se hacen realidad, pero no lo es en absoluto, porque el camino del éxito es complejo y no carente de dificultades y sacrificios. Esas definiciones de éxito de entonces me llevaron a tomar decisiones, esas decisiones me llevaron a otro país, a dejar a mi familia y mis amigos atrás, a empezar de cero, a reinventarme más de una vez en los últimos años, a fracasar antes de lograrlo, a tener altibajos, a perderme y encontrarme… Y por supuesto también me entregaron los aprendizajes, la humildad y las competencias que necesitaba para lograr ese éxito.
Ahora, unos años después, sintiéndome muy realizada en cuanto a mi trayectoria laboral y familiar, me encuentro a mis “40 y uno” replanteándome cuál será mi definición de éxito para esta nueva década, diseñando un “road trip” de éxito muy distinto, sobre todo en el ámbito laboral, donde iré encontrando nuevos obstáculos que traerán consigo un mayor crecimiento, donde volveré a equivocarme y a aprender, y seguiré desarrollando mi carrera profesional y personal, y donde aún no sé hacia dónde me llevará este camino exactamente, pero sí sé que esta vez, el éxito tiene que ver conmigo misma, tras media vida proyectando hacia fuera, es el momento de proyectar hacia adentro.
Conclusiones
En definitiva, el éxito es un proceso continuo a lo largo de la vida, que va cambiando y/o evolucionando según la etapa en la que nos encontremos, que requiere de esfuerzo, perseverancia y dedicación y, donde los fracasos forman parte del aprendizaje. El éxito es algo muy personal y puede estar influenciado externamente, haciéndonos pensar que somos exitosos, pero ese éxito tal vez no nos haga realmente felices, siendo tan sólo lo que se espera de nosotros ya sea por presión familiar, social u otros, o bien, y que es lo más difícil, podemos diseñarlo desde lo que verdaderamente nos hace sentir plenos y realizados, sin la necesidad de buscar la aprobación externa para sentirnos bien por dentro. El éxito es también un estado de ánimo, una actitud y una forma de hacer las cosas y de tomar decisiones. Y somos exitosos cuando somos capaces de elegir nuestros caminos, responsabilizándonos de ellos pase lo que pase.
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